¿Cuándo va a pagar su karma? ¿Por qué a él/ella le va tan bien si ha hecho tanto daño?
Preguntas muy frecuentes en sesión; las víctimas quejándose de los victimarios;
buscando justicia y clasificando el bueno y el malo.
La víctima y el victimario no son buenos ni malos; ambos son inconscientes, sólo que uno tiene el sartén por el mango, y el otro es esclavo.
En un mundo de lógica, la víctima sale perdiendo y no tiene escapatoria; en un mundo cuántico, la víctima está proyectando la realidad a través de su incapacidad para poner límites, para autocontrolarse y para usar el poder a su favor... Duerme profundamente.
Así que invita, desde su profunda oscuridad e inconsciencia, a todo aquel victimario que le viole los límites, que le someta y que tome su poder para si.
Y dentro de esa aberración, hay un contrato álmico luminoso, el cual dice que cuando la víctima resuelva al victimario queda liberado.
Imagen tomada de la web
El camino de llevarse al extremo tiene sus objetivos:
Que cuando la víctima se sienta totalmente invadida, en un grito de sobrevivencia ponga límites.
Que cuando se sienta sometida, acorralada y obligada a todo aquello que le mantiene en carencia (de amor, de dinero, de salud, de atención, etc...), sacará desde el fondo de la resiliencia el autocontrol para salir adelante, después de darse cuenta de que el otro no iba a hacer nada por ella jamás.
Que cuando se sienta dominada con las falsas ilusiones de un cambio que nunca llega y cansada de entregar su poder a cambio de humillaciones y de desaparecerse a sí misma, surgirá en sus entrañas una profunda rabia que le inyectará vida para reclamar su territorio.
Y después de que todo esto pase, reconocer la diferencia entre estar viva vs. muerta en vida.
Y hasta entonces, el victimario estaría pactado al despertar de la víctima, amarrado con cadenas invisibles que le llevarán a lastimarle cada día más profundo, hasta que el dolor fuera suficiente para notarse.
Y ese día en que la víctima despertara, su contrato de esclavitud del victimario terminaría... Ese día estaría libre para ir a ser esclavo de alguien más y así hasta caer en manos de un esclavo para sí mismo... Alguien que tuviera un nivel superior de victimario, para volverlo a él la víctima y empezar así el camino de su propio despertar y de su liberación.
¿Quieres dejar de jugar estos antiguos roles de víctima - victimario?
¿Te alcanza para más amabilidad en tu proceso terrenal?
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